Con Karl Lagerfeld nada es a medias, sencillo y mucho menos al azar. “No es pre-colección es colección”, aclaró el diseñador refiriéndose a su más reciente presentación para Chanel; tan extensa y surtida como sus usuales muestras de prêt-à-porter ¿Y por qué no habría de serlo cuando la “temporada crucero” es la que más tiempo pasa en tienda y moviliza las cajas registradoras tanto como sus hermanas de primavera-verano y otoño-invierno?
A pesar de que Chanel tiene seis boutiques en Singapur, el creador alemán habla de la elección del lugar como si hubiese sido prácticamente al azar: “Hoy en dia la colección crucero no se trata solo de viajar, nosotros aún viajamos con ella porque la presentamos en diferentes partes del mundo, lo hicimos en Europa, en América y era el momento de oriente”. Pero más que una simple búsqueda de inspiración, se trata de estrategia. La “Ciudad León” es el cuarto centro financiero más grande del mundo y actualmente cuenta con uno de los mayores PIB per cápita del planeta. Como señala The China Edit, tanto la población de Singapur como la de los demás tigres asiáticos (Taiwan, Hong Kong y Corea del Sur) incrementa considerablemente su poder adquisitivo y su conocimiento de moda cada año. La colección es un guiño a ese mercado con una mirada al resto del consumidor global Chanel, algo común entre muchas marcas hoy en día.
Sin embargo, la realidad es que poco o nada se afincan los seguidores de la firma en las tácticas de mercadeo siempre y cuando Karl Lagerfeld siga haciéndolos soñar e inundándolos de objetos divinos de deseo presentados de la forma más lujosa y exclusiva posible. Por ello, no fue cualquier cosa la idea de presentar Chanel Cruise 2014 en Dempsey Hill: un antiguo cuartel del ejército británico situado en la punta de la península de Malasia restaurado especialmente para la ocasión. Allí, a escala de Grand Palais, se reunieron 1200 personas en largas galerías rodeadas de persianas en blanco y negro y refrescantes paredes encaladas. Desde luego, no podía faltar entre esa multitud una amplia lista de famosos de ambos lados del hemisferio como las embajadoras de Chanel Anna Mouglalis, Astrid Bergès‐Frisbey y Zhou Xun, las actrices Dakota Fanning, Rinko Kikuchi (actriz japonesa), Fann Wong (cantante singapurense), Lun Mei Guey (actriz taiwanesa), Zoe Tay (modelo singapurense) y Jung Ryu Won (actriz surcoreana), y los cantantes Kit Chan y Choi Si Won. Sin importar en qué lugar del mundo se haga, hoy en día ningún evento de una gran casa está completo sin un A-list que incluya a los “Brad y Angelina” del mundo entero.
Tal vez Mademoiselle Chanel nunca imaginó alcanzar esas latitudes y un público tan diverso cuando inauguró su primera boutique en Deauville en mayo de 1913. En aquél entonces, solo aspiraba atraer a las mujeres de la alta sociedad francesa que veraneaban en aquella ciudad costera de Normandía. Cien años después Karl Lagerfeld puso en evidencia una vez más que el estilo propuesto por Gabrielle Chanel, con sus telas masculinas y trajes inspirados en la sastrería que llevaba Boy Capel, sigue tan fresco y ligero como en sus inicios. Las ideas de Cocó no solo sobrepasaron las fronteras, sino épocas enteras. Y hoy la peninsular y creciente Singapur es un punto importante para Chanel como lo fue la tienda de Deauville en sus tiempos.
- Graciela Martin @descosido_
Fotos: Anne Combaz cortesía de ©Chanel